miércoles, 24 de febrero de 2010

MOMENTOS

EN MOMENTOS COMO ÉSTE.....

                                                                           Foto Ary
                                                                       
                                  
En momentos como éste me pregunto si algo tiene sentido.
El agua que tomo, las flores ya marchitas del jarrón de la mesa,
tu voz que desde lejos no se si me rechaza o si me busca,
La angustia de mi infancia que retorna, mi padre que admiré pero
con quien jamás un diálogo mantuve,
las estrellas tendido cara al cielo contemplando
en el patio de la casa. Y aquellos viajes, de largas estaciones
entre la Osa Mayor y quien sabe
cuantas más constelaciones ficticias, verdaderas,
no importaba.
Solamente las rutas ignoradas, los misteriosos gases del espacio,
el hoyo negro y aquel mundo infinito
que intentaba abarcar y comprenderlo.
En momentos como éste siento pánico de que mis
ojos ya no viertan lágrimas y el árbol
seque su raíz de sueños y se queden sin alas las luciérnagas.
Viví un mundo poblado de fantasmas, pero sabía
sus nombres.
y una que otra vez me sonreían. Éramos parte
de una misma cueva,
de claroscuros y de lunas nuevas.
Nuestros amigos eran sicofantes gnomos
venidos de lejanas tierras donde las lluvias eran los cinceles
que pulían cicatrices en las piedras.
Para entonces Tú eras un dibujo que apenas comenzaba
a delinearse,
como las tardes que se van quedando hasta formar
un nido en su ropaje. Como las grietas
de los manantiales que terminan cubriéndose de agua.
Como las noches que nunca se durmieron porque las pesadillas
robaban sus cometas.
En momentos como éste el aire se calcina en
fogones de hielo
y escarbo con mis uñas los barcos enterrados
para evitar que el sueño se muera de tristeza.
En momentos como éste te necesito tanto
que me duelen los huesos y se quiebra la sangre,
y te llamo en silencio y a gritos y
muy quedo
para que no te fijes
que tengo tanto miedo.

ARY

martes, 23 de febrero de 2010

LA PALABRA EN EL TIEMPO



LA PALABRA EN EL TIEMPO


                                       Foto ARY



El tiempo y tú son facetas
de única moneda,
son comienzo y final de trayectoria,
roturas del silencio.
El tiempo y tú se dan la mano
y construyen tempestades,
analizan el surco de la futura rosa,
abandonan la sed de los amantes.
Lluvia son de esperanza
y cometa de destierros,
el tiempo y tú
sembradores de sueños.

El tiempo y tú son
el testigo y su escribiente,
son el abismo insondable
y su saeta de fuego,
la penumbra
y
(por qué no decirlo)
hasta el miedo.

El tiempo y tú son estudiosos de la música,
conocen el rumbo de los vientos,
pueden
en una concha de mar
apresar el rumor de un recuerdo.
Si el tiempo y tú quisieran
podrían cambiar el contorno de la tierra,
producir fresas amarillas
y en lugar de gases
envolver de ríos las estrellas
(Si el tiempo y tú quisieran)

El tiempo y tú son
fusión de expresión e infinito,
lectura de voces milenarias
y vocablos futuros de momentos inéditos.
Fácil es descubrirlos
en las piedras que el cincel ha bruñido,
en las manos que gritan su esperanza
y en las viejas pupilas
que el tiempo y tú han consumido.

El tiempo y tú abrieron la ventana
por la que observo la savia
infatigable de mis hijos,
la angustia -compañera insobornable-,
espejos,
pasos y caminos.
El mío es
uno más en el tiempo de un infinito libro.

ARY

domingo, 21 de febrero de 2010

NO ME HAGAS CASO

Foto ARY


A veces
tengo miedo del silencio
del aire
que se torna irrespirable y las noches
que rondan los fantasmas.

A veces
puebla el frío las entrañas y mis pasos
carecen de sentido y tengo
que arroparme con la angustia
para seguir andando.

A veces
tengo rabia de recuerdos
que oxidan
como barcos encallados, y escupo sal
y trago lluvia y sangre
y escarbo sin descanso hasta enterrarlos.

Por eso
a veces, solamente a veces,
no me hagas caso.

ARY

martes, 16 de febrero de 2010

AMOR

Foto ARY


Para llamarte
me volví calle, viento, grito,
cántaro de penumbra y soledad
de nube.
Para aguardarte
me volví piedra, sombra, tierra,
permanente guardián de tu escondida
lumbre.
Para soñarte
me volví sangre, piel, angustia,
mensajero de abismos y vendedor
de lluvias.
Para vivirte
me extendí como un árbol
nutriendo mis raíces
de tu savia profunda.

ARY